Canal de la ceja y Hermana Mayor

El pasado viernes, animados por la pequeña nevada caída cuatro días antes, nos dirigimos a Cotos con el objetivo de practicar lo aprendido durante el curso de alpinismo que realizamos hace un año. Aunque no éramos muy optimistas, sí teníamos la esperanza de encontrar algo más de nieve de la había. La verdad es que este invierno está siendo catastrófico para quienes nos gusta el manto blanco sobre las montañas.

Confiando en que más arriba la situación fuese mejor, comenzamos a andar pisando la única nieve (más bien hielo) que había en el puerto.

Casi sin nieve en el puerto de Los Cotos

El camino nos lleva hasta la laguna, que encontramos helada.

La laguna helada

Hoy no hay mucho que ver, así que después de tomar un bocadillo nos "disfrazamos" de alpinistas...

... y nos disponemos a subir por la canal de la ceja. En la siguiente foto (tomada en la excursión anterior) está marcado el recorrido.

Canal de la ceja

Esta canal tiene una pendiente media de unos 45º grados, con un par de sitios algo más complicados por la presencia de bloques que obstruyen el paso. El estado que presenta la poca nieve que hay no facilita nada la progresión.

Y aquí viene Juanjo...

A mitad del recorrido nos desviamos un poco a la derecha para entrenernos con un resalte de hielo de unos pocos metros.

Un pasito...

... y otro más.

El mismo paso, visto desde arriba. Ahora es el turno de Juanjo.

Despues de picar el hielo retomamos la canal y nos aproximamos al paso más estrecho y complicado.

Ahora Juanjo se prepara para superar el resalto, con mis pinchos en primer plano.

Superados estos bloques llegamos al punto en el que aparece por nuestra derecha la salida del tubo del Robot. Remontamos unos metros más y salimos a la zona más amplia que queda bajo la cornisa que habitualmente se forma a la salida de los tubos, hoy inexistente por la escasez de nieve. La salida la hacemos por la izquierda, por pendientes de unos 50º-60º donde buscamos algo de hielo gracias a su orientación norte.

Finalmente llegamos al promontorio que hay en la cumbre de la Hermana Mayor, donde recogemos los trastos y emprendemos la vuelta por la ruta normal.

Hemos matado el gusanillo, pero nos quedamos con ganas. O cambia el tiempo o habrá que emigrar a otras latitudes!


Saludos montañeros.